🇪🇸 Si fuera el último día de mi vida me gustaría surfear todo el día
Reflexiono sobre cómo el surf representa las luchas y alegrías de la vida, y por qué, si fuera mi último día, elegiría pasarla surfeando.
Si, si fuera el último día de mi vida, me la pasaría surfeando todo el día. Me encanta surfear, es una de mis grandes pasiones. Una ola siempre es diferente, al igual que la vida, donde siempre ocurren cosas. A pesar de los problemas en el amor, con la pareja, amigos o familia, al final todo tiene solución, por más complejo que sea el problema.
Recordemos esas peleas de amigos, ¿recuerdas esa última vez que dejaste de ver a tu mejor amiga por un malentendido? Y al final, se reencuentran después de años gracias a un amigo en común. Es igual que con el surf; tuvieron un gran pico de amistad, como la ola, y luego, boom, explotó la ola, en este caso, la amistad, pero luego todo se calma y vuelve a la normalidad.
Luchar por remar hasta llegar a un punto en el cual puedes tomar la ola es idéntico a luchar por estudiar en tu curso, instituto, universidad. Recuerdo las veces que me amanecía junto a mis compañeros para los proyectos que nos dejaban nuestros profesores, o aquel curso de tesis donde nuestro profesor cuestionaba nuestras hipótesis. Fue un sinfín, pero al final dio sus frutos. Estas adversidades nos preparan para los proyectos en el trabajo, haciéndolos más fáciles de resolver.
La gran adrenalina de estar parado en la tabla es una sensación única de felicidad. Al igual que en la vida, cuando ganas un campeonato, lo celebras a lo grande. Lo mismo me pasó cuando gané mi primera hackathon; me sentí super feliz, explotando de alegría.
Las olas son interminables, las luchas son constantes, y la adrenalina nunca se pierde. Por estos motivos, me encanta el surf; tiene una relación profunda con la vida. Y lo mejor de todo, el mar es gratis, un regalo de nuestra madre naturaleza.